El email ha sido, y continúa siendo, un método muy eficaz para los vendedores.
Algunas investigaciones llevadas a cabo por la asociación Direct Marketing Association y Demand Metric determinó que “El email tiene un ROI medio del 122 por ciento, cuatro veces mayor que otros formatos de marketing como las redes sociales, publicidad por correo y búsqueda de pago.”
Te hace el trabajo.
Pero hay un problema que todos los vendedores deben hacer frente y que va a parar al terrible agujero negro que es la carpeta de spam.
El informe de referencia de entregabilidad de 2017 de Return Path descubrió que el 20 por ciento de todos los emails comerciales acababan en la carpeta spam.
Y seamos sinceros. Un email es casi hombre muerto en el mismo momento en el que llega.
Quiero decir, ¿cuántas personas van a emplear tiempo en rebuscar en su carpeta de spam para ver si, quizás, solo quizás, tu email haya llegado allí sin querer?
Yo diría que ninguna.
Esto es bastante problemático porque la media de índice de apertura es solo del 32 por ciento e incluso más bajo para algunos sectores.
Y cuando tienes en cuenta que tus emails van a la carpeta de spam, ese número disminuye aún más.
Ahora vamos a ver algunas razones sobre por qué los emails van a la carpeta spam y cómo asegurarte de que los tuyos no acaben allí.
Las 10 razones más comunes de por qué los emails van a la carpeta spam
Razón #1: No te han dado permiso
Razón #2: La información del remitente es incorrecta
Razón #3: No existe una dirección física
Razón #4: Estás utilizando palabras de spam
Razón #5: Tu título no es suficiente
Razón #6: Has incluido archivos adjuntos
Razón #7: Hay una imagen grande con poco texto
Razón #8: No hay enlace para darse de baja
La ley CAN-SPAM
Primero, déjame contarte brevemente sobre la ley CAN-SPAM.
Es una ley que fue aprobada en 2003 y establece las reglas para el correo electrónico comercial.
Si no te suena, te recomiendo que eches un vistazo a la guía de conformidad de la ley CAN-SPAM de FTC.
Allí, se destaca los requisitos principales y describe cuestiones de incumplimiento que pueden darte problemas. Es bastante corto pero te pondrá rápidamente al día.
Algunas áreas que ocupa son no utilizar asuntos de correos engañosos, incluir una dirección física, hacerle saber a los destinatarios como darse de baja y cumplir con las peticiones de baja.
Si tenemos en cuento que el incumplimiento puede conllevar a multas de hasta 41,484 de dólares, querrás conocer todos los detalles sobre la ley CAN-SPAM.
Además de multas bastante considerables, el incumplimiento de estos requisitos podrían hacer que tus emails vayan a la carpeta de spam.
Esto es algo que tenemos que tener en cuenta, sobre todo si eres nuevo en el marketing del correo electrónico.
Ahora vayamos al meollo de la cuestión.
Razón #1: No te han dado permiso
La primera regla del del marketing de email es siempre tener permiso antes de enviar un email.
Debería ser obvio, pero nunca compres una lista de emails ni los obtengas a través de cualquier otra medio.
No solo no es ético, sino que no es efectivo y puede llevarte a problemas legales serios.
Las direcciones de email solo se deben añadir cuando alguien voluntariamente se suscribe. Es así de simple.
Si no, probablemente acabe en spam.
O en el peor de los casos, te llegará una multa.
Razón #2: La información del remitente es incorrecta
Esto es lo que FTC dice sobre la información del remitente.
“Tu ‘De,’ ‘Para,’ ‘Responder a,’ y la información de encadenamiento (incluido el nombre del dominio del que procede y la dirección de correo) deben ser correctos e identificar a la persona o negocio que inició el mensaje”.
En otras palabras, debes mostrar claramente quién eres (o quién es tu empresa) y no incluir ninguna información errónea que pudiera engañar a alguien.
Por ejemplo, la información del remitente en tu email podría decir “Emil de Sleeknote”.
Razón #3: No existe una dirección física
Esto puede ser sorprendente para algunos email marketers.
Pero el FTC también dice que “Tu mensaje debe incluir una dirección postal física válida. Puede ser tu actual dirección, un apartado de correos en el que te hayas registrado o un buzón privado al que te hayas registrado con una agencia de recogida de correo.”
Si no, no estarás cumpliendo con los requisitos y tu correo podría acabar en la carpeta de spam.
Se trata de que puedan localizarte de algún modo.
Verás que casi todos las empresas legales tienen direcciones físicas al final de cada correo.
Aquí puedes ver un ejemplo de la empresa de impresión de camisetas Skreened.
No tiene que destacar, simplemente tiene que estar ahí.
Los que más cometen este error son las pequeñas empresas que trabajan desde casa porque simplemente no quieren poner sus direcciones personales al público.
Y es algo entendible.
En tal caso, la mejor opción es tener un apartado de correos que puedas usar en lugar de tu dirección personal.
Razón #4: Estás utilizando palabras de spam
Automational lo explica así: “Los filtros de spam miran el contenido que hay dentro de tu email y deciden si van a la carpeta de spam o a la bandeja de entrada de tu cliente”.
Decir cosas como “¡Duplica tus ingresos!” o “¡Has ganado!” es una manera infalible de obtener la atención no deseada de estos filtros.
Si se fijan en “palabras desencadenantes” cuestionables, se activa la alerta y probablemente envíen tu email a la carpeta de spam aunque vayas con las mejores intenciones.
Es importante saber qué palabras hay que evitar, como las que nos enseña Digital Training Institute.
Son un buen punto de partida.
Pero para una lista más amplia, echa un vistazo a estas 438 palabras llamativas de spam de Automational.
Y esto nos lleva al siguiente punto.
Reason #5: Tu título no es suficiente
El título de un email lo es todo.
Además del nombre del remitente, es lo único en lo que se fija el destinatario para decidir si es legal o no y si debería abrirlo.
Convince and Convert incluso dice que el “69 por ciento de los destinatarios de email notifican un email como spam basándose solo en el asunto”.
Por eso necesitas perfeccionarlo.
Además de evitar las palabras desencadenantes, hay otras prácticas de asunto de emails mejores que querrás seguir para evitar que tus emails caigan en las garras del spam.
Estas son:
- No usar mayúsculas en exceso, porque parece que estás gritando a los destinatarios
- No exageres con las exclamaciones
- No hagas falsas promesas
- No seas insistente
Cuando estés pensando un título, te recomiendo ponerte en la piel de tus suscriptores.
¿Alguien puede pensar que tu email es spam según tu titular?
Si es así, retócalo hasta que sea aceptable.
Razón #6: Has incluido archivos adjuntos
Los archivos adjuntos deben evitarse por dos razones.
Primero, alertan a los filtros de spam y reducen las probabilidades de que tu email llegue a la bandeja de entrada de tu destinatario.
Porque, según ellos, un archivo adjunto podría incluir virus peligrosos que están esperando a atacar el dispositivo de cualquier víctima.
Segundo, pueden ralentizar el tiempo de carga, sobre todo si son grandes y pesados.
Generalmente hablando, no hay necesidad de envía un email comercial con un archivo adjunto.
Toda la información, oferta y CTA puede y debe incluirse en el cuerpo del email.
Razón #7: Hay una imagen grande con poco texto
La incorporación de elementos visuales a las campañas de marketing es algo muy popular.
De hecho, la creación de contenido visual es un objetivo primordial para el 55 por ciento de los creadores de contenido B2C.
Por eso muchos vendedores quieren que sus emails lleven imágenes pesadas. Es simplemente una cuestión de estética.
Y algunos de los mejores emails profesionales que veo contienen imágenes.
Este de InVision LABS es un gran ejemplo.
Pero Email on Acid explica que utilizar una imagen grande con poco texto a veces puede darte problemas.
Esto es lo que dicen sobre ello:
La idea es que los emails con imágenes pesadas sin mucho texto pueden alertar a los filtros de spam. Esta teoría fue formulada porque los spammers a veces muestran información en imágenes grandes en vez de mediante texto para que los programas de filtros no puedan “leer” el contenido.
Y esto tiene sentido, y puedo entender por qué desconfiarían de emails con imágenes.
Pero, al fin y al cabo, los filtros de spam pueden malinterpretar fácilmente este tipo de email y pensar que eres un timador cuando en realidad solo intentar darle a tus suscriptores un atractivo visual.
Así que ten en mente este que te acabo de contar.
Y no quiero decir que no debas utilizar imágenes. En absoluto.
Pero debes ser consciente de la relación texto-imagen e intentar que haya más texto que imagen. Es decir, un 60% más o menos de texto y 40% de imagen.
Quédate con esta fórmula y no pasará nada.
Razón #8: No hay enlace para darse de baja
¿Te has visto en alguna situación en la que no querías recibir ningún email más de una empresa en concreto, pero no había manera de darse de baja?
Yo sí y es muy frustrante.
En el mejor de los casos, acabas molestando a los suscriptores o acabas en la carpeta de spam.
Y en el peor de los casos, acabas multado por el FTC.
De una u otra forma, acabas perdiendo.
Por eso es primordial (y obligado por ley) poner un enlace para darse de baja, como en este email de LinkedIn.
Para saber más sobre cómo reducir tu índice de bajas, lee la guía de Sam.
Razón #9: Estás enviando emails a direcciones inactivas
Creo que todos hemos visto un mensaje como este en algún momento.
Esto significa que el email se envió a una dirección inactiva y no fue entregado.
Si lo haces muchas veces y no paras de enviar emails a direcciones inactivas, los filtros de spam penalizarán tu dominio o ISP.
A cambio, las probabilidades de que tus correos vayan a spam son mayores.
¿La solución?
Asegúrate de “limpiar” con frecuencia tu lista de emails y borrar las direcciones inactivas.
Razón #10: Hay errores de ortografía y gramática
Josh Pyorre escribió en Cisco Umbrella sobre la sorprendente frecuencia de errores de ortografía y gramaticales en los emails de phishing.
Dice que el uso de herramientas de traducción por parte de hackers es frecuente para convertir su texto en el idioma que quieren. Y acaba sonando raro, por decir algo.
Por eso los filtros de spam están alerta y los errores ortográficos y gramaticales podrían hacer que tu email acabe en la carpeta de spam.
Y por no mencionar que no parecerás nada profesional ante la audiencia.
Por eso debes tener mucho cuidado y comprobar dos y tres veces un email antes de enviarlo.
Aunque los correctores de ortografía están bien para muchas cosas, no detectan todos los errores.
A veces, es mejor hacerlo a la antigua usanza y que un humano compruebe el texto en busca de algún error.
Y también está Grammarly.
Es una extensión de Chrome que asegura que tus textos estén correctos y, bajo mi punto de vista, es bastante efectivo. Hasta con los errores mínimos.
Aunque existen versiones de pago, puedes utilizar la versión básica completamente gratis, suficiente para satisfacer las necesidades de la mayoría de comerciantes.
Cómo comprobar si será spam
Llegados hasta aquí, deberías hacerte ya una idea de qué no hacer.
Pero hay una herramienta que quiero destacar y esa es Mail Tester.
Y funciona así.
Coge un email que vayas a enviar a tus suscriptores y envíalo primero a Mail Tester.
Y comprueba tus resultados.
Mail Teter te dará una puntuación según tu “nivel de spam”.
Baja un poco por la página y verás más detalles sobre lo que está bien y lo que necesita mejorar.
Creo que es una gran manera de rápidamente saber los errores que estás cometiendo para que puedas ponerle solución cuanto antes.
Conclusión
No eres un príncipe nigeriano que busca compartir una parte de su herencia con alguien a cambio de una cuota mínima.
Simplemente eres un email marketer consciente que busca conectar con ventaja y cuidar a sus clientes hasta que realicen una compra.
Pero los filtros de spam no pueden saber esto.
Y casi todo el mundo tiene muy poca paciencia para tratar con un email que parezca en lo más mínimo spam.
Lo sé.
Para conseguir que lean tus emails, debes hacer que los abran primero.
Y para hacer esto, es esencial que tus emails no acaben en la carpeta de spam.
Aunque hay muchas razones por las que esto pasa, los problemas que he señalado aquí suelen ser los más comunes.
Y por suerte, pueden prevenirse.
Si te familiarizas con el CAN-SPAM y entiendes la lógica que hay detrás de los filtros de spam así como lo que piensan los lectores humanos, solo te quedará eliminar esos elementos que podrían considerarse spam.
Como resultado, más emails acabarán donde tiene que acabar: en las bandejas de entrada.
¿Qué técnicas has utilizado que hayan resultado en más entregas y menos bajas?